«LA PROMESA INCUMPLIDA: LOS CONFLICTOS INTERNOS EN EL MUNICIPIO DE RIPAMONTI Y EL MALTRATO A FUNCIONARIOS QUE SACUDE VIÑA DEL MAR»
Este domingo, Macarena Ripamonti fue reelecta como alcaldesa de Viña del Mar, cargo que asumió hace tres años bajo el lema de «municipio de cuidados.» Sin embargo, lo que en su momento prometía ser una administración empática y cercana, hoy se ha convertido en un verdadero campo de batalla para los funcionarios municipales, quienes denuncian una serie de irregularidades e injurias laborales al interior del municipio.
Las promesas de Ripamonti, que en su discurso buscaban mejorar las condiciones laborales, hoy se ven desmoronadas frente a los testimonios que apuntan a un trato denigrante hacia los trabajadores, especialmente desde el círculo más cercano de la alcaldesa. Empleados municipales han presentado múltiples acusaciones de acoso y abusos constantes por parte de personas de confianza de Ripamonti, lo que ha generado un ambiente laboral nocivo y desalentador. Ante estas serias denuncias, el silencio de la alcaldesa ha sido interpretado como una suerte de complicidad que permite, e incluso alienta, que este clima tóxico persista sin sanciones ni medidas correctivas.
La semana pasada, las asociaciones municipales se vieron obligadas a alzar la voz en una declaración conjunta, exigiendo acciones inmediatas para mejorar el ambiente laboral y reformular los canales de comunicación. Según los testimonios recogidos, la situación en la municipalidad es insostenible; cada vez más funcionarios han tenido que recurrir a licencias psiquiátricas para sobrellevar el desgaste emocional y psicológico que este trato abusivo ha provocado.
Además, en un **comunicado intergremial** emitido el 24 de octubre de 2024, las asociaciones de funcionarios de Viña del Mar reafirmaron su compromiso con la comunidad y destacaron la resiliencia de los trabajadores municipales, quienes, a pesar de las adversidades, mantienen su vocación de servicio. En el comunicado, las asociaciones recalcan la necesidad de respeto hacia la carrera funcionaria y urgen a mejorar el clima laboral. Asimismo, hacen un llamado a las nuevas autoridades que asumirán próximamente a dar prioridad a estas demandas, con el fin de asegurar un ambiente de trabajo digno y justo para todos los empleados municipales.
El comunicado cierra con un firme compromiso de las asociaciones para seguir luchando por los derechos de los trabajadores, subrayando la urgencia de eliminar cualquier acto que ponga en riesgo su integridad y bienestar.
En lugar de implementar el tan anunciado «municipio de cuidados,» la gestión de Ripamonti parece estar sumida en tensiones y polémicas que imposibilitan un entorno saludable para los empleados municipales. La situación actual pone en entredicho no solo la capacidad de liderazgo de Ripamonti, sino también la coherencia de sus promesas de campaña. La comunidad espera respuestas y acciones concretas que demuestren un compromiso genuino con los funcionarios municipales, quienes, hasta ahora, se sienten expuestos y desprotegidos bajo una administración que se vendió como empática, pero que en la práctica parece ser insensible a las demandas de sus propios trabajadores.