Causó mucha extrañeza la votación unánime de este jueves en el Consejo Regional respecto a la solicitud de efectuar una auditoría externa al Gobierno Regional.
El origen del conflicto: Un concurso bajo sospecha
Hace meses, al término de un concurso público para el cargo de auditor en el gobierno regional, se propuso el nombre de un profesional, sin embargo, cuando este fue presentado a los cores, alguien reparó en que dicho postulante contaba con cuestionamientos en otra administración regional y resultaba impresentable que asumiera como auditor del GORE de Valparaíso en tales circunstancias.
Lo que procedía entonces, era nombrar al segundo de la terna: un profesional en retiro de las FF.AA. Evidentemente, al oficialismo —y en particular al Gobernador— no le acomodaba ese perfil, pese al sólido currículum que el postulante presentaba.
El Lobby y la votación: Las alianzas ocultas
Dicha incomodidad motivó al Presidente del CORE a realizar un lobby con consejeros de derecha para asegurar que el nombre del candidato a auditor fuera rechazado. Esto ocurrió tras un intento infructuoso de dejar sin efecto el concurso para evitar la votación y declarado desierto.
Finalmente, el Gobernador consiguió los cuatro votos que le faltaban y los encontró en las filas de Renovación Nacional: Edith Quiroz, Emanuel Olfos, Juan Ibacache y Rodolfo Silva; se optó por rechazar la propuesta y por ende se deberá llamar a un nuevo concurso, el cual por las formalidades que exige este tipo de procesos demorará a los menos 8 meses más.
La jugada de los cores Republicanos
Tras el rechazo del auditor en el pleno, los Republicanos ejecutaron una audaz jugada política: propusieron, conforme a la ley, la realización de una auditoría externa. No obstante, el oficialismo y un core de oposición intentaron bloquear el acuerdo, sugiriendo que fuera la Contraloría la entidad encargada de hacer una revisión acotada de algunos programas de transferencias, lo que a ojos de republicanos era una intervención puntual y no permitía una revisión general de toda la situación financiera.
La semana pasada, en la comisión de régimen interno, la propuesta republicana se aprobó por un estrecho margen. El oficialismo en alerta recurrió nuevamente a los Cores de RN para frenar la iniciativa en el pleno, pero algo cambió en los 4 Cores. Es muy probable que el triunfo de José Antonio Kast incidiera en los consejeros de derecha y esta vez se alinearían con la oposición y finalmente, el Gobernador no quiso quedar públicamente como alguien que se opone a la transparencia en su administración.
Conclusión: ¿Unidad o conveniencia?
La propuesta de los Republicanos se aprobó de manera unánime, anotándose un punto político en el momento de mayor tensión entre la bancada republicana —liderada por la diputada Chiara Barchiesi— y el gobernador Rodrigo Mundaca. Incluso esta votación llevó a la diputada hacer un comunicado de prensa y valorar el acuerdo, resaltando el aporte de Chilevamos, siendo una señal de gobernabilidad. También la legisladora resaltó la unanimidad de la votación.
El dato curioso: La explicación de una core Republicana Paulina Yáñez y el core de RN Juan Ibacache no coinciden y dan 2 versiones distintas sobre la misma auditoría y la gestión y autoría de la misma.
Aca hay 2 lecturas:
La primera que más allá de la explicación que se da, lo que importa es la unidad de toda la oposición y fue primera vez que se da en materias sensibles (los Cores de derecha son mayoría y esta nunca se había ejercido).
Lo más significativo es haber logrado la auditoría externa de manera unánime, lo que habla bien de la institución.
Ahora el Gobernador debe en un plazo breve hacer el nuevo concurso del auditor del gobierno regional. Finalmente hay que puntualizar para la comprensión de los lectores que el quiebre de algunos cores de Renovación Nacional con Republicanos se generó a comienzos del año cuando se acordó la distribución de comisiones y los cores republicanos le pasó la máquina a Chilevamos; de ese momento la oposición perdió la mayoría en el core.
En poco tiempo más nuevamente vienen las conversaciones y será el momento para hacer las paces y buscar los equilibrios, de modo tal que queden atrás esas rencillas y se piense y actúe pensando en el beneficio de la región y no en cálculos pequeños o de intereses personales, por muy legítimos que estos sean.
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