MUNICIPIO DE VIÑA DEL MAR ADMITE FALTA DE PRESUPUESTO PARA CORTAFUEGOS Y LIMPIEZA DE PASTIZALES
El municipio de cuidados de Viña del Mar ha anunciado que no cuenta con presupuesto suficiente para llevar a cabo la creación de cortafuegos ni la limpieza de pastizales en zonas críticas de la comuna. Esta situación genera preocupación entre los vecinos, especialmente de cara a la temporada estival, cuando aumenta el riesgo de incendios.
Según información obtenida desde el interior del municipio, los trabajos necesarios aún no han comenzado. En su lugar, se habría solicitado a la comunidad que se encargue de realizar la limpieza de los terrenos, comprometiéndose el municipio únicamente a retirar los desechos generados. Esta medida ha generado críticas, ya que no contempla ningún tipo de seguro contra accidentes para los vecinos que participen en las labores de limpieza.
Organizaciones vecinales y habitantes de sectores vulnerables al fuego han manifestado su descontento ante la falta de acciones concretas y los riesgos que implica la solicitud municipal. Asimismo, algunos concejales han pedido explicaciones sobre el manejo del presupuesto destinado a la prevención de incendios, cuestionando la falta de planificación y la responsabilidad delegada a la ciudadanía.
A pocas semanas del inicio de la temporada alta de incendios, la comunidad de Viña del Mar exige respuestas claras y acciones inmediatas para garantizar la seguridad de las familias y los bienes en las zonas más expuestas.
Mientras tanto, el concejal José Tomás Bartolucci conversó con Evolutiva Medios y señaló:
«Resulta impresentable que la municipalidad no se haga cargo del trabajo de desmalezado, que representa amenazas y riesgos para las personas que lo realizan. Es importante que este trabajo sea llevado a cabo por personal especializado, ya sea propio de la municipalidad o de empresas externas que cuenten con los seguros, la capacitación, herramientas e instrumentos adecuados para desarrollar esta labor.
El desmalezado implica riesgos como caídas, cortes por el mal uso de herramientas, exposición a plagas que podrían causar enfermedades y posibles reacciones alérgicas en quienes realizan esta tarea.
Una vez más, esto evidencia la improvisación de la municipalidad. Considerando el incendio ocurrido en febrero de este año, es inaceptable que no se hayan dispuesto los recursos necesarios para realizar este trabajo de forma anticipada, evitando recurrir a los vecinos. Esos voluntarios, al intentar proteger sus vidas y propiedades del avance de las llamas, enfrentan riesgos y amenazas que deberían ser asumidos por una gestión responsable.»